El Reino hachemita de Jordania es como un puente bien cimentado entre el mar y el desierto.
Tierra de belleza cautivadora y contrastes.
Desde el fértil y siempre cambiante Valle del Jordán, hasta los cañones del remoto desierto, inmenso e intemporal.
Los viajeros explorarán increíbles castillos en el desierto. Observarán la imponente belleza del desierto de Wadi Rum o se bañarán en las relajantes aguas del Mar Rojo.
Adéntrese en la ciudad más antigua excavada en piedra hace más de mil años: Petra.